31/8/09

Paradoja

Y luego dicen que la cumbre de Unasur no sirvió. Esta es la paradoja: a todos los cerdos les llega su gripe....

Lean esto..

30/8/09

Declaración Indígenas Panamá Costa Rica










Los Pueblos Indígenas Panamá-Costa Rica

(Naso / Ngäbe / Bribri / Cabecar)

Reunidos en la comunidad El Norteño, Comarca
Ngäbe-Bugle, República de Panamá, más de 150
líderes y liderezas indígenas, hemos compartido
tres días de intercambio de experiencias de
lucha, conocimientos tradicionales y el análisis
de las amenazas que atentan contra la vida de
nuestros pueblos y de la madre naturaleza.

Este espacio permitió conocer más sobre nuestros
derechos humanos y como indígenas y a identificar
nuestros problemas para consolidar una agenda de
acciones de lucha y resistencia conjunta.

Al ver que las causas y efectos de los
megaproyectos y concesiones de recursos naturales
dentro de nuestros territorios están desplazando,
dividiendo y destruyendo todo a su paso, en
nombre de un desarrollo insostenible, incoherente
y empobrecedor, que no respeta la vida, ni la
diversidad cultural.

Declaramos
* Rechazar y exigir la anulación de todos los
megaproyectos, proyectos, miniproyectos y
concesiones aprobadas o en trámite de exploración
y explotación minera, hidroeléctricas, turismo de
alto impacto y otras actividades de inversión
negativa que invaden territorios indígenas.
* Demandamos el cumplimiento inmediato de las
medidas cautelares otorgadas por la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a las
comunidades Ngäbe, afectadas por el proyecto
hidroeléctrico Chan 75 de la empresa transnacional AES.
* Distinguir como traidores y non gratos a
todos esos dirigentes y autoridades tradicionales
que venden a su pueblo con los gobiernos,
empresarios criollos y grandes transnacionales.
* Exigir el inicio de discusión en la
Asamblea Nacional de Diputados de Panamá, para la
ratificación del convenio 169 de la OIT , sobre
pueblos indígenas y tribales en países
independientes antes del 12 de octubre de 2009.
* Respaldar la Marcha Nacional del Pueblo
Ngäbe y Naso en Panamá y todas las
manifestaciones y actividades que se desarrollen
el 12 de octubre, en el marco de los 517 años de
resistencia de los pueblos indígenas.
* Continuar con el fortalecimiento de las
organizaciones de base y el trabajo en alianza de
nuestros pueblos transfronterizos, tomando como
referencia y guía la Agenda Indígena
Mesoamericana: "Por la Defensa de Nuestra Madre Tierra".
* Poner plazo de 1 año, a partir de la firma
de esta declaración para que el gobierno de
Panamá y de Costa Rica hagan las gestiones necesarias para:
* La creación de la Comarca Naso Tjër-Di
* La demarcación y ordenamiento del territorio
indígena Kekoldi
* La definición por ley de las áreas anexas de
la Comarca Ngäbe Bugle.

Dado en la comunidad El Norteño, Rep. De Panamá,
a los 24 días del mes de agosto de 2009.

Publíquese y cúmplase

Firman las organizaciones participantes
* PANAMA VERDE - Rosalva Jiménez
* ARBOL DEL MAÑANA (ASAAM) - Roberto Baken
* COMITÉ DE SALUD DE NORTEÑO - Alfonso Rodríguez
* COMITÉ DE ARTESANIA DE NORTEÑO - Florina Hernández
* ASOCIACION KEKOLDI - Gloria Mayorga
* ASOCIACION Y COMISION DE MUJERES INDIGENAS TALAMANCA -
Edith Villanueva
* ASOCIACION DE MUJERES PRODUCTORAS WATSI - Minta Morales
* CONSEJO COMUNAL - Heiner Gallardo
* ASOCIACION DE DESARROLLO INDIGENA DE
TERRITORIO BRIBRI (ADITIBRI) - Agustín López
* RED DE RESISTENCIA INDIGENA DE BOCAS DEL TORO (RRIB) -
Reynaldo Gonzáles
* FUNDACION NASO TJËR DI - Félix Sánchez
* ODESEN - Edwin Sánchez
* CEDETENG - Pedro Abrego
* CONGRESO AREA ANEXA - Leonardo Donald
* COMITÉ DE DESARROLLO (CODESCON) - Dionicio Clemente
* ASOCIACION DE JUVENTUD DE SILICO CREEK - Yin Gallego
* ASOCIACION DE PRACTICAMENTES DE LA MEDICINA
TRADICIONAL NASO - Antonio Sánchez
* ASOC. DE PROD. AGROPECUARIO, ARTESANAL,
ECOTURISMO, INDUSTRIAL - Martínez Abrego
* COMISION CONGRESO REGIONAL ÑO KRIBO - Ricardo Clemente

Camino al sentido

El sinsentido de vivir cobra cuerpo de forma abrumadora. Gallinazos con disfraz de milpa y sacuanjoches con máscara de crisantemos anuncian músicas sordas dispuestas a ensordecer al más sagaz. El sentido de todo se resume en unos bongós que rebotan en estas paredes, en la necesidad de seguir el ritmo para no morir rendidos ante la evidencia.
Camino a ese sentido, aguardo el ambarque de las horas, el necesario vuelo hacia lo improbable, la machacante necesidad de remar a canalete en este océano turbulento y amenazador. Seguiré, seguiremos todos y todas los que tercamente insistimos en la nada. A veces, incluso hace unos minutos, un cansancio secular, elefantiásico, se apodera de mi cuerpo y coloniza mi espíritu. Provoca, el cansancio digo, la tentación de salir corriendo, de refugiarme en el regazo del amor sin más ansias que una caricia eterna que me haga olvidar la mierda en la que nadamos. Pero sería un espejismo, o tal vez solo un decorado mermo, cojo por necesidad, engañoso y falaz. Ya sé lo que es intentar la escapada... y no funciona. Así que, a pesar de estos huesos carcomidos y de aquellos ideales fragmentados, sigo, seguiré, camino al sentido, al único sentido que parece tener sentido: el del Otro, el de los Otros que sin conocernos nos miran desafiantes desde algún pliegue de la desdicha.

29/8/09

Sombras en Bogotá

Qué tiene esta ciudad de fantasmas que se arrastran entre ritmos de tamboras o salsas trasnochadas. Cientos de seres deformes, deformados por el abandono, se mueven, piden, amanezan, balbucean, y en la noche sus sombras se revelan, conforman un ejército de arrastrados que contradicen la publciidad oficial y la estupidez general.
No hay que ir al sur, o a las veredas del terror para estar con los excluidos. Incluidos, empotrados en las calles de la normalidad en esta anormalidad tan permanente que parece habitual y absurda.
Nunca lo he comprendido y hoy, tampoco lo consigo.

El peligro de discutir lo perverso

Este artículo de Marcelo Cantelmi está muy bien. Desde la tranquilidad de la historia: los golpes de estado no pueden ser calificados entre los que me gustan y los que no me gustan. ¡Arriba Honduras!

"El hecho más grave que la región enfrenta en estas horas respecto al golpe en Honduras es que se lo discuta. El simple ejercicio de que se eleve una duda de legitimidad frente a esta ruptura institucional, alerta como casi ningún otro gesto respecto de la debilidad larvada en las estructuras republicanas de Latinoamérica". Sigan leyendo

28/8/09

Entrevista a Galeano

Sigue siendo una referencia: Eduardo Galeano hablando del momento: "En el caso de las bases militares en Colombia no solo ofende la dignidad colectiva de América Latina sino también la inteligencia de cualquiera, porque que se diga que su función va ser combatir las drogas, ¡por favor, hasta cuando! Casi toda la heroína que se consume en el mundo proviene de Afganistán, casi toda, datos oficiales de Naciones Unidas que cualquiera puede ver en Internet. Y Afganistán es un país ocupado por Estados Unidos y como se sabe los países ocupantes tiene la responsabilidad de lo que ocurre en los países ocupados, por lo tanto, tienen algo que ver con este narcotráfico en escala universal y son dignos herederos de la reina Victoria que era narcotraficante."

Lea la entrevista completa en ADITAL

Pensar y querer (una y otra vez)

Después de tantos días de rabia y dolor, me toca refugiarme en los inspiradores de lo hermoso. Errico Malatesta fue uno de ellos, uno de los principales. En tiempos de pragmatismo e imposibilidad de soñar, les regalo estos fragmentos de lo posible y lo necesario: pensar y querer (y luego dicen que somos violentos...jajajaj y nos la pasamos repartiendo amor como condenados).


"Nuestro objetivo es el bien de todos, la eliminación de todos los sufrimientos y la generalización de todas las alegrías que puedan depender de la voluntad humana; es la paz entre todos los seres humanos; es una nueva y mejor civilización, una humanidad más digna y feliz. Pero creemos que el bien de todos no puede alcanzarse realmente más que con la consciente colaboración de todos; creemos que no existen formulas mágicas capaces de resolver las dificultades; que no hay doctrinas universales e infalibles a todos los hombres y a todos los casos; que no hay hombres y partidos providenciales que puedan sustituir útilmente la voluntad de los demás por la suya propia y hacer el bien a la fuerza; creemos que la vida social adquiere siempre las formas que resultan del contraste de los intereses ideales de los que piensan y quieren. Por eso convocamos a todos a pensar y a querer".

"Anarquista es, por definición, aquél que no quiere estar oprimido y no quiere ser opresor; aquél que quiere el máximo bienestar, la máxima libertad, el máximo desarrollo posibles de todos los seres humanos.
Sus ideas, su voluntad tienen origen en el sentido de simpatía, de amor, de respeto hacia todos los humanos: sentimiento que debe ser lo bastante fuerte para inducirlo a desear el bien de los demás como el suyo propio y a renunciar a aquellas ventajas personales que exigen, para ser obtenidas, el sacrificio de los demás.
De no ser así, ¿por qué debería ser enemigo de la opresión y no procurar, en cambio, convertirse en opresor?
El anarquista sabe que el individuo no puede vivir fuera de la sociedad, que incluso no existe, en cuanto individuo humano, de no ser porque lleva en sí los resultados de incontables generaciones pasadas y se aprovecha durante toda la vida de la colaboración de sus contemporáneos.
Sabe que la actitud de cada uno influye, directa o indirectamente, sobre la vida de todos reconoce, por lo tanto, la gran ley de la solidaridad que predomina en la sociedad como en la naturaleza. Y, como desea la libertad de todos, tiene que desear que la acción de esta necesaria solidaridad, en lugar de ser impuesta y sufrida inconsciente e involuntariamente, en lugar de ser desatendida y ser explotada con ventaja para unos en detrimento de otros, pase a ser consciente y voluntaria y se realice, por lo tanto, en igual beneficio de todos.
O ser oprimido, o ser opresor, o cooperar voluntariamente para el mayor bien de todos. No hay otra alternativa posible; y los anarquistas están naturalmente, y no pueden no estarlo, a favor de la cooperación deliberada y libre."


El santo remedio

En estas tierras, pero en aquellas también, se ha encontrado el santo remedio contra todos los males. Que le roban la cartera, la culpa es de Chávez; que le duele el estómago, la culpa es de Chávez; si su carro está viejito y pide recambio, la culpa es de Chávez; que tiene miedo de perder unas elecciones, échele la culpa a Chávez para subir en favorabilidad; que quiere dar un golpe de estado clásico, límpiele la cara echándole la culpa a Chávez de tener un plan perverso para tomarse su país....
En algunos casos se puede sustituir el nombre del ínclito por el de Correa, jamás por el de Evo (que como es indiecito, en el fondo, no da miedo). La mentira campa por sus fueros y el mundo, como diría Galeano, está patas arriba. Un dictador democrático con sangre hasta en el tuétano, la mitad de sus parlamentarios encausados por paramilitarismo y un país hundido en su economía y en su inseguridad, es el héroe mediático regional y mundial. El resto, que con errores tan humanos como humanos, han logrado modificar el curso de algunas injusticias seculares y buscan construir modelos propios, son unos villanos.
Claro que quizá tiene que ver con la manía de que no les gusten las bases gringas que se van a sembrar en Colombia, o se opongan frontalmente a los leoninos acuerdos de ¿libre comercio? con el vecino del norte, o con que nacionalicen (pagando hasta el último dólar) sectores estratégicos que estaban en manos de multinacionales que durante años han dejado las sobras en estos países... solo quizá tenga que ver con estos acontecimientos a que tan poco nos tenían acostumbrados los presis de la zona.
En Europa dicen que es que son muy tropicales, que son bananeros, vulgares. No como Berlusconi (civilizado organizador de encuentros swinger), ni como Zapatero (doble cara para todo y bronca permanente con el del frenillo gallego), ni como Sarkozy (playboy de los 70 jugando a vaquero)... esos si son civilizados.
En fin, el santo remedio se los dejo a su disposición, hoy que Unasur trata de poner orden en este despelote y que los cuchillos volarán de punta a punta en la mesa de Bariloche.... Lo que digo: patas arriba.

27/8/09

Y todavía preguntan...

Uribín pide ayuda internacional en lugar de reconocer la masacre como parte de la locura sangrienta de sus militares/paramilitares... ¿Y todavía preguntan si fue venganza?

La masacre de Nariño: ¿una venganza?


Semana.com conoció el reporte del Ejército donde decía que el esposo de Sixta Tulia García, una de las víctimas de la matanza de 12 indígenas awá este miércoles, era guerrillero muerto en combate. Ella lo denunció como un asesinato ilegal a un civil inocente.
Sixta Tulia García, de 35 años, siempre sostuvo que el pasado 23 de mayo, ella y su esposo, Gonzalo Rodríguez, caminaban a las 8 de la mañana por una trocha del resguardo indígena Gran Rosario.

De pronto, aparecieron unos hombres con uniformes camuflados, chalecos negros, brazaletes amarillos y pañoletas negras que les cubrían la cara y sólo les dejaban ver los ojos.

Sixta Tulia contó que estos hombres los detuvieron y que se llevaron a Gonzalo “a unos 20 metros” de donde ella estaba. De pronto, se escucharon unos disparos y cuando ella quiso ir a ver si se trataba de Gonzalo, un uniformado la tomó del cabello, le impidió que caminara y le dijo que esos tiros no se los habían dado a su marido.

Luego, le recomendó que caminara hacia la vía principal, que comunica a Pasto con Tumaco, y que allí se podría encontrar con su esposo.

Ella salió y más adelante, en efecto, lo encontró sentado y con el cuerpo encorvado. Estaba muerto, con varios disparos que le dejaron la cabeza destrozada. Los uniformados sacaron el cadáver en una camilla. El gobernador del resguardo les pidió que entregaran el cuerpo, pero los hombres se negaron y lo trasladaron a Tumaco. Allá, la viuda debió reclamarlo en la Fiscalía.

Semana.com conoció el reporte militar donde soldados explican que la muerte de Gonzalo Rodríguez fue en combate y le señalan de ser jefe guerrillero. "El 23 de mayo de 2009 el Batallón Contraguerrilla Número 23 realizó una operación militar llamada "Mosquetero" en el Kilómetro 80 La Guayacana media hora hacía adentro. Junto con un guía llegan al lugar hacía las 3 horas. Esperaron que amaneciera luego el guía indicó a la persona llamada Gonzalo Rodríguez quien es cabecilla del frente 29 de las Farc. De inmediato se da la captura y este emprende la huida tirando el arma hacia la maraña. Los militares logran su captura de nuevo y le ponen en conocimiento los derechos del capturado, junto con la señora y luego los separan; ubican el arma que portaba y lo retienen. En un descuido de los militares el sujeto emprende la huida hacia el sitio donde se hallaba el arma tirada, la coge sale corriendo y empieza a disparar siendo dado de baja por la tropa".

Es decir, a pesar de las incongruencias de la versión, lo reportaron como un muerto legítimo. Sixta Tulia no se quedó callada y denunció su versión ante las autoridades.

Este miércoles 26 de agosto, a las 5 de la mañana, un grupo de hombres también en camuflado y encapuchados, llegaron a la casa donde ella dormía junto con otros parientes y dispararon.

La mataron a ella, a cinco niños, una niña y cinco adultos más. La niña era Angie Jazmín Rodríguez, de 5 años, y los niños, Alexander Rodríguez, de 8 años; Yeison Ferney, de 6 meses; Laurencio García, de 5 años; Roberto Guanga Nastacuas, de 17 años, y Luis García, de 13 años.

Los adultos eran Sixta Tulia Garcia Guanga, de 35 años; Laurencio García, de 38 años, Carmela Guanga, de 18 años; Amparo Nastacuas, de 21 años; Armando Alvaro Nastacuas, de 19 años, y Fabio Taicus García, de 18 años.

Y quedaron heridos Javier García, de 20 años; David García, de 12 años, y Yolanda Bisbicus, de 22 años.

Por hora, las autoridades de Nariño han descartado que se trate de un atentado de las Farc, como el que ocurrió en febrero de este año, cuando esa guerrilla mató con cuchillos y machetes en el resguardo Tortugaña-Telembí a 11 indígenas awá, entre los que había dos mujeres en embarazo.

Pero la búsqueda de los responsables avanza. En la noche del miércoles, el presidente Álvaro Uribe, tras un consejo de seguridad, dijo que “se ha definido que la Unidad de Derechos Humanos de la Fiscalía, con el CTI (Cuerpo Técnico de Investigaciones) y el apoyo de la Dijin, aboquen de inmediato esta investigación”.

Y pidió ayuda de organismos internacionales. “Esta noche hemos pedido a la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, de las Naciones Unidas, que acompañe la misión investigativa”. Naciones Unidas aceptó el acompañamiento. Además, el ministro de Defensa, Gabriel Silva, se comprometió a buscar apoyo internacional para la Fiscalía en las investigaciones que lleven a encontrar a los responsables.

Y para quienes tengan información, Uribe ofreció 100 millones de pesos y la Gobernación de Nariño otros 30 millones.

Objetivo militar

¿Qué es objetivo militar? Todo, todo es un objetivo militar dependiendo de quién tenga las armas. Cada gorila, cada imbécil armado cree que su pensamiento es el único y que las balas le dan argumentos. En Locombia todo es objetivo militar, menos los 'bienpensantes' que amparados en el rancio nacionalismo y en el uribismo barato defienden un modelo asesino y fascista. Hace unos días, la Diócesis de Quibdó advertía de la campaña de "limpieza Social" en esa ciudad, donde jóvenes pobres, prostitutas y ladrones de poca monta están siendo ejecutados en el silencio de la mayoría y, por descontado, de las autoridades.
La última joya que me llega es esta: la carta que han hecho llegar en Neiva a los líderes y lideresas de los movimientos LGBT. Seguro que habrá quiénes justifiquen la amenaza, seguor que las buenas formas justifican esto.


COMUNICADO No. 001


A TODA LA COMUNIDAD:

  1. DECLARAMOS OBJETIVO MILITAR PRIORITARIO A TODOS LOS ESTABLECIMIENTOS DE AMBIENTE HOMOSEXUAL (GAY – LESBIANAS) DE LA CIUDAD DE NEIVA.

  1. DECLARAMOS A LOS PROPIETARIOS Y ADMINISTRADORES DE ESTOS ESTABLECIMIENTOS COMO OBJETIVO MILITAR.

  1. DECLARAMOS OBJETIVO MILITAR A TODOS LOS PROVEEDORES Y PERSONAL QUE LABORA Y AYUDA A DICHOS ESTABLECIMIENTOS.

  1. SE DECLARA OBJETIVO MILITAR A TODOS LAS PERSONAS (HOMBRES Y MUJERES) QUE PERTENECEN AL AMBIENTE HOMOSEXUAL DE LA CIUDAD DE NEIVA. (GAY – LESBIANAS)

A TODOS SE LES AVISA QUE HEMOS INICIADO UNA LIMPIEZA SOCIAL EN LA CIUDAD DE NEIVA EMPEZANDO CON TODOS LOS HOMOSEXUALES, LESBIANAS, TRAVESTIS Y DEMAS PERSONAS DE ESTE AMBIENTE QUE RECIDEN EN LA CIUDAD.

NO SE TENDRA CONSIDERACION ALGUNA POR ESTAS PERSONAS YA QUE REPRESENTAN LA PEOR DEGRADACION DE LA SOCIEDAD ACTUAL

COMO CONSECUENCIA HEMOS EMPEZADO APLICAR LOS PALNES CORRECTIVOS A ESTA SITUACION.


NEIVA AGOSTO DEL AÑO 2009.

COMANDO SUR DE LAS AGUILAS NEGRAS



Pronunciamiento Awá

Hoy lloramos la muerte de cuatro (4) niños indefensos, que junto a sus hermanos, padres y familiares fueron masacrados a las cinco de la mañana del día veintiséis (26) de Agosto, en su humilde vivienda, siendo preocupante que entre las personas masacradas está la señora TULIA GARCIA, única testigo sobreviviente de hechos ocurridos el día 23 de mayo de 2009, en donde fue asesinado su esposo GONZALO RODRÍGUEZ, hecho que había denunciado responsabilizando al Ejército Nacional.

Léalo completo:

http://www.onic.org.co/actualidad.shtml?x=36201

Uribe pide ayuda

Cuando los sospechosos de matar son los agentes del Estado o los esbirros paramilitares, Uribe pide ayuda a la ONU para esclarecer los hechos. Por supuesto, al presidente no le pareció que la masacre de ayer fuera tan importante como para ir a Nariño e hizo un consejo de seguridad en su palacio dorado de Bogotá. Nada se sabrá, como nada se sabe de las otras decenas de indígenas asesinados este año ni sobre los miles de desaparecidos, ni sobre nada.
Siempre criticamos al periodismo, y yo lo sigo haciendo, pero un buen ejemplo de como visibilizar la historia sin mucha intervención es el portal de Semana dedicado al fenómeno del paramilitarismo en Colombia. Es altamente recomendable darse un paseo por el terror en Verdad Abierta.

26/8/09

De qué sirven las lágrimas

No sirve de nada llorar, ni patalear, ni emputarse con la nada, ni maldecir a los hijoeputas que matan y destruyen en nombre del orden, del desarrollo, de su única manera de entender las cosas.
Esta madrugada, otra vez, otra brutal masacre contra indígenas Awá y no pasará nada porque la historia no ha hecho sino comenzar y el presidente-asesino será reelegido y ese país que se retuerce con las entrañas llenas de mierda estará feliz porque Juanes canta en La Habana o porque Obama se pone una manilla con la bandera de Colombia o por no sé qué estupidez cultural.
Si las cosas son como son, Colombia estaría de luto permanente mientras no cesen estas muertes, esos desplazados, esa violenta injustucia que todos los días machaca a indígenas, campesinos y sectores populares urbanos... No será así.... no será... esta es la historia de Tulia, asesinada esta madrugada junto a 11 miembros de su familia. En su casa, en la misma humilde casa a donde llegó hace unos meses sin su marido. Esta vez ha sido tan descarado que ni siquiera han podido acusar a los de siempre... Las armas truenan y siempre apuntan a los mismos.

"Los indígenas Awá de Nariño vivieron en la mañana de este miércoles un nuevo episodio de terror. A las cinco de la mañana, un grupo de hombres armados, encapuchados y vestidos con prendas militares llegó caminando al resguardo Gran Rosario, ubicado en la vía que comunica a Pasto y Tumaco.

Los encapuchados ingresaron a una casa y comenzaron a disparar. En el suelo quedaron muertas 12 personas, entre las que se encuentran cinco niños indígenas, uno de ocho meses y los otros, menores de 10 años. Entre los adultos, está Tulia García, otra mujer y cinco hombres. Todos eran parientes y estaban alojados en aquella vivienda.

Tulia había presenciado la muerte de su esposo, Gonzalo Rodríguez, el pasado 23 de mayo. Ella denunció que ese día, a las 8 de la mañana, iba con su marido por un camino de trocha cuando se les atravesaron varios hombres uniformados, armados, portando brazaletes amarillos y pañoletas negras que les cubrían la cara y sólo les dejaban descubiertos los ojos.

Tulia denunció que esos hombres detuvieron a Gonzalo y se lo llevaron y que luego ella escuchó unos disparos. Cuando quiso ir a buscar a su esposo, según contó, los hombres se lo impidieron y uno de ellos le dijo que estuviera tranquila, que no habían disparado contra Gonzalo, y que más bien tomara el camino hacia la vía Pasto-Tumaco que por ahí encontraría a su marido.En efecto, lo encontró sentado, pero con su cuerpo encorvado. Estaba muerto, con varios disparos que le dejaron la cabeza destruida. Tulia denunció que tenía la impresión de que esos hombres de camuflado que mataron a su esposo eran del Ejército. Entonces empezó a insistir en que la muerte de su esposo fue un falso positivo, según le dijo a Semana.com una fuente que conoció su testimonio.


Ahora, los violentos fueron por ella y varios integrantes de su familia. Del sitio donde ocurrió la masacre alcanzaron a huir tres indígenas. Dos son menores de edad que están heridos. Uno de ellos es el hijo del gobernador del resguardo, Luis Rodríguez. El muchacho había sufrido un atentado hace poco y había salido de la zona, pero volvió recientemente".
Tomado de Semana.com

regalo de agosto


Clemente Silva, protagonista clave de La Vorágine (José Eustasio Rivera), en apartes de un monólogo brutal sobre las caucheras que desangraron selva y vidas en los contronos del Amazonas:

"¿Quién estableció el desequilibrio entre la realidad y el alma incolmable? ¿Para qué nos dieron alas en el vacío? ¡Nuestra madrastra fue la pobreza, nuestro tirano, la aspiración! Por mirar la altura tropezábamos en la tierra; por atender el vientre misérrimo fracasamos en el espíritu. La medianía nos brindó su angustia. ¡Sólo fuímos héroes de lo mediocre!"

"¡Quise hacerle descuentos a la ilusión, pero incógnita fuerza me disparó más allá de la realidad! Pasé por encima de la ventura, como flecha que marra su blanco, sin poder corregir el fatal impulso y sin otro destino que caer. ¡Y a esto le llaman mi porvenir!"

"Siento que en mí se enciende un anhelo de inmolación; mas no me aúpa la piedad del mártir, sino el ansia de contender con esta fauna de hombres de presa, a quienes venceré con armas iguales, aniquilando el mal con el mal, ya que la voz de paz y justicia sólo se pronuncia entre los rendidos. ¿Qué ha ganado usted con sentirse víctima? La mansedumbre le prepara el terreno a la tiranía y la pasividad de los explotados sirve de incentivo a los explotadores. Su bondad y su timidez han sido cómplices inconscientes de sus victimarios"

Noche de Gelman

Hacía tiempo que no recalaba en Gelman. Pero la noche es un espacio de soledades acompañadas, de palabras que te susurran a gritos lo que, sin molestar, se cuela en el alma por la puerta entreabierta de los sueños.


basta no quiero más de muerte
no quiero más de dolor o sombras basta
mi corazón es espléndido como una palabra

mi corazón se ha vuelto bello como el sol
que sale vuela canta mi corazón
es de temprano un pajarito
y después es tu nombre

tu nombre sube todas las mañanas
calienta el mundo y se pone
solo en mi corazón
sol en mi corazón


Camina Juan Gelman siempre en la delicada yunta del abismo con la marisma, se debate entre la necesidad de creer y de amar y la certeza de un mundo que ha sido despiadado con él, con los suyos y con los otros. Siempre es así ¿no?

Si me dieran a elegir, yo elegiría
esta salud de saber que estamos muy enfermos,
esta dicha de andar tan infelices.

Si me dieran a elegir, yo elegiría
esta inocencia de no ser un inocente,
esta pureza en que ando por impuro.

Si me dieran a elegir, yo elegiría
este amor con que odio,
esta esperanza que come panes desesperados.

Aquí pasa, señores,
que me juego la muerte.


Quizá como él, mucho más biche, precoz, apenas dejando la ceguera, me apoyo en tu pecho para alejarme de las sombras de la vida con la diferencia, con la abismal diferencia, de la maestría de las palabras...

Ya que navegas por mi sangre
y conoces mis límites,
y me despiertas en la mitad del día
para acostarme en tu recuerdo
y eres furia de mi paciencia para mí,
dime qué diablos hago,
por qué te necesito,
quien eres, muda, sola, recorriéndome,
razón de mi pasión,
por qué quiero llenarte solamente de mí,
y abarcarte, acabarte,
mezclarme en tus cabellos
y eres única patria
contra las bestias del olvido.

Y al final, el asunto es de existencia, de supervivencia, de entender que entre un extremo y el otro solo hay una leve grieta de emoción

de lo posible a lo probable/del
sueño a la realidad hay como
mares/playas nocturnas donde
animales de pico descarnan
formas mojadas por los jugos
del corazón/así/viajamos
del pecho al seco sol que dora
la maravilla/o existir

25/8/09

El espejo patriarcal

EL MALCONTENTO

Paco Gómez Nadal
paco@prensa.com

¿Cuál es la profunda raíz de la injusticia? Cada cual tiene una respuesta a esta preguntan tan abierta como abrumadora. Para tratar de intuir los orígenes buscamos en los estudios sociales (que si la redistribución de la riqueza…), en los políticos (que si el secuestro del poder…), en los económicos (que si la acumulación de capital o el modelo instaurado con el inicio de la agricultura…), en los esotéricos (que si la mala vibra que genera el pinche jarrón chino ubicado mal en la entrada de la casa…) … mil y una explicaciones para lo no justificable, para lo lacerantemente vulgar de esta injusticia obviada por la minoría y que afecta a las mayorías.

La única explicación que me ha sorprendido en los últimos años tiene que ver con la gestión del poder y, especialmente, con la gestión patriarcal del poder y la dominación que se ejerce a través de la coacción sexual.

Al leer los textos de mujeres como Victoria Sau, Casilda Rodrigáñez o de la mismísima Hannah Arendt, me vi obligado a sacar el espejo –el que escondo para evitar encontronazos conmigo mismo– y mirarme a la luz de la tradición patriarcal para ver si, como yo ingenuamente creía, había borrado de mi el machismo –mera representación cosmética del patriarcado– o si seguía siendo un gorila–macho que se cree superior a la mujer.

Confieso, ahora que no me lee nadie, que perdí la prueba. Sí, quizá había avanzado algo en lo cosmético, en las formas machistas, pero, en el fondo: mi genética incorporaba –incorpora– los modos patriarcales de entender la vida, la relación con los otros y las otras, la forma de amar patriarcal, incluso la manera de odiar…

Lo que podría haberse quedado en una reflexión personal, individual, íntima, se transformó en una mirada crítica sobre la sociedad, sobre nuestros mundos, sobre la manera de ser y de dejar de ser.

El patriarcado está instalado en el fondo de nosotros y nosotras y nada hemos avanzado en realidad. Hace unas semanas, escuchaba a una amiga andina comentar cómo, en su opinión, la “liberación de la mujer occidental era una farsa”. Siempre he pensado esto, aunque decirlo en voz alta o en artículo público es provocar un posible linchamiento de mis amigas.

Socialmente –igual que en mi caso personal– damos pasitos en la limpieza cosmética de la desigualdad pero no hemos avanzado ni hacia la equivalencia (concepto mucho más interesante que el de igualdad) ni mucho menos hacia un contexto donde las formas del poder abandonen el cruel patriarcado para reinventarse desde una asunción de la sexualidad natural y desde roles no condicionados por la superioridad de género.

La mujeres entran al universo masculino, pero no hay una revolución cultural que nos sitúe en equivalencia. De ahí lo que Sau denomina como Mujer Función Hombre en el hogar, o la Mujer Coartada en el terreno profesional (“el tipo de mujer que, por circunstancias diversas, se abre camino en áreas profesionales o políticas tradicionalmente reservadas a los hombres, y que al hacer el análisis de una insólita situación atribuye su éxito a la ayuda y cooperación recibida de aquéllos, pasando por tanto a defender la tesis de que las mujeres que no llegan a sus mismas cotas de éxito es por culpa de ellas mismas”). El hombre, en todo caso, no abandona su posición de supremacía a pesar de dejar un pequeño espacio público a mujeres que consienten las reglas del juego patriarcales.

El tema es muy amplio, imposible de evacuar en un artículo de periódico, pero mi intención es provocarles a sacar el espejo. Los hombres en especial, porque son mis compañeros de ruta; las mujeres con capacidad crítica, porque hay que revisar si estamos removiendo o no los cimientos de este poder patriarcal que nos lleva a las guerras, al instinto de dominación, a un universo político y mercantil caníbal, a la intensa y perversa represión de la sexualidad femenina –reducida a “dar placer al otro”–, a la representación fálica y animalizada de la sexualidad masculina y, entre otras cosas, a la educación troglodita de nuestros hijos e hijas que siguen creyendo que la virgen María quedó preñada por un viento alisio, que la mujer es emocional y variable, que el hombre es decidido y no se complica, y que, con estos antecedentes, entran a una vida plagada de traumas y frustraciones.

Pelos y señales

Les recomiendo la serie de artículos de Ramón Lobo desde Kabul. Hay libertad en la palabra y años de patear el mundo oscuro y se le nota a Ramón que ya, a estas alturas del partido, no se cree las milongas fácilmente.
Bares, calles, peluquerías, la vida no está en las conferencias de prensa y este compa sabe rastrear bien donde no suelen mirar los periodistas.
En fin, que lo disfruten... Cuadernos de Kabul

24/8/09

Gotas


Caen persiguiendo el rastro de las huellas, siempre en la misma dirección, a veces jugando de lado, en actitud suicida cuando chocan contra tu piel o esquivan un mechón agitado. Las mando con el firme propósito de rodearte, con pequeños mordiscos de agua, con mis manos descoyuntadas de distancia, necesitadas de tu espalda, incluso de las trochas menos transitadas de la casa habitada ya por mi voz y mis pretéritos. Cuando resbalan en ti, lo hacen en una caricia que sólo termina al llegar al piso y, aún así, unidas otra vez en la masa húmeda que alguna vez fueron, juguetean con las plantas de tus pies, esas que se levantan con liviandad, apoyadas ora en los dedos, ora en tus talones, al ritmo de ese cuerpo tembloroso de contenernos y de secuestrar la voz que quiere gemir al mundo la hermosura de nuestra existencia.
Cuando estás con ellas, estás conmigo... y tan sola. Nadie puede invadir el espacio que construyen vos y ellas, sacrosanto altar de humedad y vapor, donde la desnudez es protectora y donde los viajes interespaciales están permitidos, sin límites, sin más tiempo que el que aguante el latigazo que enfila tu espalda cuando todos los poros se organizan para abrirse de par en par. En ese momento, tu cabeza tiende a hundirse en tu pecho; el antebrazo se hace fósil en la pared; una mano languidece trémula, aún latente, aún rebosante; las rodillas componen un rap dedicado a los planetas más lejanos; tus preñados ojales de piel abren tu cuerpo para invitarme a ser en él, y yo, en la incontestable distancia que nos obliga, viajo hacia ti dispuesto a no romper la magia del momento ni la laboriosa tarea de las gotas que ahora, si hacen bien su tarea, te abrigarán con el calor y la frescura que guardo para ti.

23/8/09

Acá se ganó una batalla

Acá se luchó una batalla. Fue hace 10 años, pero aún en las paredes hay pintadas que delatan al enemigo: "No a los mineros, a los gobernistas ni a los traidores". Acá, a punta de bala y fuego, se ganó una batalla. Cientos de indígenas armados echaron a la empresa que pretendía arrancar el cobre de estas montañas tan golpeadas por la historia y por los que la escriben.
Acá, pasando la maltrecha valla externa y bajo este techo metálico incandescente de trópico, un grupo de hombres y mujeres hablan de dignidad -¡qué desfasados!-, hablan de un "ya está bien" y de un "nos cansamos" que se traduce en la necesidad de luchar, de pelear de frente contra todo lo que los amenaza y disminuye. Pienso en las sortijas de oro que se ponen los que no pisan la tierra, me acuerdo del gesto automático e irresponsable de prender el aire acondicionado, de arrancar el carro, de meter la tarjeta en la ranura del cajero automático... ¿quién piensa en el patio trasero? ¿en todo lo que acontece para que podamos tener y hacer sin pensar?
Un celular lleva alojadas en su batería las espaldas gastadas de cientos de africanos atrapados en una mina, el Kw pagado con más o menos sacrificio contiene bosques arrasados y comunidades desgajadas de la tierra para construir una hidroeléctrica 'limpia', la fiesta que anoche disfrutaban cientos en los bares del barrio es un grano que supura pus de miles de excluidos cuya fiesta se limita a un calabazo con arroz blanco y una grasienta loncha de jamoneta...
Acá, donde aprendo del tiempo y de sus impertinencias, escucho y entiendo que no hay vida digna sin valentía, que no hay caminos fáciles, que el enemigo es terroríficamente grande pero que YA NO HAY VÍCTIMAS. Un dia, un día que se alimenta de los días, todo reventará y los silencios se convertirán en gritos ensordecedores, el hambre devorará a los acomodados ciudadanos de bien, la tierra cobrará el delito de la angurria solo a los angurrientos y la justicia, que solo depende de las manos de los seres humanos, tendrá la marca del tiempo en el que en sitios como este, donde tablones reciclados y sillas sin respaldo ni lógica juegan a ser catapultas sociales, se sembró la semilla de la cólera, del hartazón.
Acá pienso en este universo y todo se hace chiquitico y comprensible, ausente de razón, pleno de necesidad.
Acá, está comenzando una nueva batalla.
Hay-que-seguir-ensanchando-las-grietas

21/8/09

Nubes con palabras

Desde la nube en la que me sosiego me llegan palabras prestadas:

"Dichoso aquel que una mañana
de repente
se aparta del camino que anduvo cada día
durante muchos años hasta el inapelable
distrito del deber
(...)
Dichoso aquel que un día desanduvo la vida
hasta alcanzar la paz de lo no aconsejable'


La nube me conoce perfectamente. Sabe cómo acariciarme con el algodón de su vaho, sabe dosificar humedad y ternura, besos preñados de cielo y palabras cosidas con pespunte a la espalda de mi conciencia. Las palabras -bendito regalo de quiénes saben juntar emociones, y separlas, y dosificarlas, regando puntos y comas, guiones alargadores, paréntesis promisorios o corchetes que secuestran el aire- son la materia prima de las nubes. Los físicos, que no tienen ni idea de cuál es la materia de la que está compuesta la humanidad, se empeñan en hablarnos de vapor, de condensación, de cúmulos y estratos... pero obvian que las nubes en las que nos podemos encaramar se van construyendo palabra a palabra, emoción a emoción, beso a caricia, sueños contra desvelos. La paz de lo no aconsejable, esa otra plataforma desde la que observar este mundo sin paz, es sin embargo, una vereda tan anhelada como repudiada. Lo razonable, lo aconsejable, suele pelear de frente con lo vital y la vida, así, no deja de convertirse en una sucesión de eventos aconsejables que destruyen lo hermoso que teníamos dentro en el minuto cero.
La nube no entra en ese terreno de "lo aconsejable". Lucha, luchamos, contra las convenciones que enredan lo que no tiene enredo, que complican lo que debería ser agua de quebrada corriendo a la desembocadura, cantarina, dichosa. Mi nube, que es tan tú, es el único espacio dichoso donde puedo imaginarme y allá, protegido en los pliegues blancos que me dispones, quiero reconvertirme en el biencontento malhumorado al que siempre he aspirado ser.

20/8/09

En la era del fascismo

El fascismo no parece ser un problema solo del poder, sino de cómo las gentes se acurrucan en ese poder y cuidan su ceguera con primor para no tener que saberse cómplices. Es como cuando uno sabe que está haciendo algo ilícito, está apenas comenzando, pero enfrenta la disyuntiva de dar marcha atrás, reconocer en público la cagada y asumir las consecuencias (la verdad está sobrevalorada) o seguir adelante, terminarr el 'trabajo' de forma limpia y confiar en que el secreto así lo será mientras no salga de su boca.
Las poblaciones de las sociedades fascistas son así. Saben que algo anda mal, que están siendo cómplices de algo con tintes poco éticos, terribles la mayor parte de las veces, pero siguen en el carrusel tratando de aferrarse a las justificaciones generales, aquellas que tranquilizan por colectivas.
Diría yo que en estos tiempos vivimos, en Occidente y en los entornos occidentalizados de la periferia, en un clima fascista. Democracias mentirosas, violencia estatal incontrolada, enemigos de papel para justificar persecuciones y matanzas, el imperio de la economía (y cuando la economia está por encima de la política estamos hablando de, por ejemplo, el complaciente Chile de Pinochet), y la cultura del simulacro alimenatada todos los días en la hoguera mediática.
Los ciudadanos pelean por un empleo y se masturban en la soledad torturante de su miseria ética; los periódicos nos cuentan de cientos de muertos reventados por el imperialismo sin nombrar jamás esa palabra; los políticos fingen lo público para cuidar la agenda privada que no conocemos; el discurso es solo uno y las alternativas se muestran como sospechosas de terrorismo (ya solo hay buenos o terroristas); los excluidos del paraiso dan patadas de ahogado tratando de tomar aire para aguantar un rato más en la fosa de mierda en la que los obligamos a despertar cada mañana...
Es fascismo, pero a esa palabrita la enterramos con el siglo XX y habrá que pedirle a los semánticos de la postmodernidad que nos den otra, otro término para denominar esta podredumbre.
Los cómplices, al igual que lo hicieron en su momento los alemanes cómplices, los españoles cómplices o los italianos cómplices, seguiremos seguros de estar en el bando contrario y a diferencia de entonces, cuando el enemigo era diferente pero muy parecidito a los 'buenos', nosotros tenemos la ventaja de saber que al otro lado solo hay encapuchados dentados que quieren arrebatarnos a nuestros hijos y comerse sus entrañas. Muy cómodo.

18/8/09

El paraíso vacuo

Paco Gómez Nadal
paco@prensa.com

Si una característica tiene esta postmodernidad, más o menos global en la que navegamos, es el cambio de paradigmas, el final de lo social, de lo comunitario, de lo común. Cambiamos la quizá ingenua, pero necesaria causa de la Humanidad con mayúsculas por lo local, por lo próximo, por las batallas de jardín, por lo personal, por la estrecha frontera del cuerpo propio, por el triste spa donde los biombos garantizan la intimidad que se sentía amenazada por la vieja y diminuta toalla de sauna.

Hablar del bien común, escribir sobre el ámbito de lo público o propugnar por una economía solidaria y no destructiva es sinónimo de filocomunismo, de viejera o de estupidez “científica”. Sin embargo, elogiar la cultura del emprendedurismo –individual–, del éxito –individual–, del consumo –individual–, de la autoayuda –que no va en carro, sino que es individual– y de los chakras –los del cuerpito individual– es estar a la moda, entender el entorno cambiante y potenciar una sociedad de individuos responsables.

Me cruzo todo el tiempo con amigos, amigas o conocidos que han abrazado este freaky age de la “sanación” –individual–. Van a terapias, participan en ceremonias de “limpieza”, aprenden feng shui o se hacen vegetarianos para salvar su alma y su cuerpo y consideran, aunque algunos lo digan con la boca chiquita, que la pobreza, la exclusión, la drogadicción o la estupidez mental es consecuencia de un karma o de la mala energía que la infeliz víctima no ha sabido trabajar. La culpa de todo es del individuo –victimarios y víctimas al tiempo–, así como está en su mano alcanzar el paraíso postmoderno.

La tendencia sanadora empuja al vegetarianismo no por el bien del planeta, sino por la salud mental del hígado interior; invita a abandonarse en los brazos del sexo tántrico no para liberarnos de la sociedad patriarcal sino para extender el placer hedonista; promulga un abstencionismo político no por descrédito en la clase corrupta sino por desidia colectiva, y construye con materiales ecológicos su casita en el campo no para demostrar que se puede vivir de otra manera sino para vivir hacia dentro a su manera.

Los que no han llegado tan lejos, practican la nueva religión del “yo mismo” con profesionalidad, pero desde la ignorancia. Se encierran en edificios o urbanizaciones amuralladas y vigiladas por circuito cerrado de televisión; le enseñan a sus hijos que no hablen con desconocidos cuando desconocen a la mayoría de sus vecinos o compañeros de escuela; consagran su vida a un “no me moleste” o a un “quiero realizarme” que siempre conjuga en primera persona del singular, y se presentan a las puertas del poder público solo para preguntar aquello de “¿y de lo mío qué?”. Lo nuestro, lo de todos, se reduce a una serie de autopistas reales y virtuales y a un (súper) mercado común que no tiene nada que ver con lo comunitario sino con lo masivo.

En el paraíso prometido se es onanista, ciego y sordo, un poco pervertido, apenas un superviviente acorralado por el propio miedo impuesto desde afuera. En ese paraíso de neón y vacuidad la gente se tiene miedo mutuo, un joven negro y en shorts es un delincuente por definición y una mujer sociable de más es una santa menos en el pabellón masculino, los partidos de fútbol se juegan en canchas cerradas y acristaladas por aquello de la balacera, las madres entregan a sus criaturas a instituciones educativas privadas donde se les enseña a afilar y utilizar las uñas, y las conmociones generales duran lo que dura el decreto que las ordena.

Allá, en ese paraíso, no podría existir un Parque de los Aburridos –porque fisgonear la partida de dominó ajena es delito–, la incertidumbre del amor libre se sustituye por la certera doble moral –donde un solo casamiento mantiene varios prostíbulos–, el debate de ideas queda reducido a la falsa idea de la democracia mediática, y el voto se ejerce de forma digital desde la misma pantalla de computador desde donde se otea amigo o pareja en un motor de búsqueda que aplica algoritmos para detectar tus coincidencias con otros seres solitarios, pero de chakras impolutos que navegan en la pantalla propia y en la bragueta ajena abrazados a la fibra óptica.

El paraíso vacuo es fácil de manejar, pero insoportable de vivir si se piensa o si se cree, ingenua pero necesariamente, que no somos nadie sin los otros y que la salvación individual depende indefectiblemente de la salvación de la Humanidad. Vuelta a empezar.

15/8/09

Festival de verano





En Kabul (Afganistán), 500 kilos de explosivos han puesto el punto y seguido al Festival de Verano preleectoral en el que los cuerpos humanos se pesan en vísceras dispersas mientras el resto del planeta discute sesudamente sobre geopolítica y seguridad. En Durango (México), el concierto de plomo se ha celebrado en una cárcel y 19 músicos han prestado su sangre para seguir escribiendo la partitura de la periferia, la de los desechos humanos que se arruman en establecimientos con muros que no logran contener la furia de los que se saben muertos en vida. En Taiwán, siguen enterradas en lodo y aninomato unas 300 personas, el público ausente del Festival de Verano del Morakot. Las denominan como víctimas de un tifón, un fenómeno climatológico clasista y racista (no se conoce de huracanes o vientos que maten en cantidades a los ricos mientra beben Martinis en la terraza de su piscina o que devasten poblaciones de clase media noruega donde la gente muere de tristeza o por los tiros de un vecino desquiciado de tanta calidad de vida).
Mientras todo esto sucede, las televisoras occidentales y desarrolladas rememoran el Festival de Woodstock, los diarios hacen especiales de verano disertando sobre el terrible precio de las hamacas o la crisis del chiringuito y las radios hacen tertulias veraniegas en las que el buen rollo es proporcional al guión y al calor.
A veces, solo a veces, esta cabecita no da para tanto. Todos los días, sin excepción, este corazón revienta por saturación de contrastes en este verano -allá donde tengan la estación- donde hay tan poco que celebrar y tanto pinche Festival. A veces, bastantes veces, me canso de esta especie a la que pertenezco y de este mundo en el que navego.

14/8/09

Com-postura

Compost, materia orgánica pudriéndose para reparirse y ser abono, el poder de la humedad, el tiempo, la acumulación de capas de desechos hechos materia prima del futuro. Com-postura, cuando nuestra posición es sólo el primer paso para cambiarla. Los huesos, en proceso de disolución, pulverizaditos, se acomodan dentro de este cuerpo que a veces es tan molesto y que, cuando es tocado por las yemas adecuadas o por los labios elegidos, puede ser el abono más fértil para la vida. Guardo la com-postura para los momentos más delicados, esos en los que el abismo parece una autopista llena de señalización y áreas de servicio inservibles pero repletas de familias aburridas que comen tobledones y soda para evitar su propio renacimiento.

Operación Pandemia

Hace unas semanas, el amigo Pepe Tobar me mostró este video, ahora me lo reenvía Julia. Es una prueba de que para hacer solo hay que pensar y que con muy pocos recursos se puede hacer una pieza provocadora. Yo soy de la misma tesis que el autor ¿será por eso que me gusta?

11/8/09

La cáscara y la pulpa

Paco Gómez Nadal
paco@prensa.com

El Estado se ha convertido en una especie de contratista de contratistas. Construye y hace cosas, más o menos eficientemente –más menos que más-, sin echarle cabeza al por qué de las cosas o el para qué de ellas. La mayoría de quejas que diariamente salen en los diarios de comunidades llorosas por la falta de atención estatal tiene que ver con construcción. Estamos en el mundo del bloque.

El trío mágico de peticiones en las comunidades suele consistir en: educación, salud y electricidad. Aunque, en realidad, lo que piden es escuela, centro de salud y torres de energía, ya que nadie se preocupa por el contenido de las edificaciones sino por las construcciones en sí.

La cinta costera es un ejemplo que apuntala mi tesis, pero es mucho más dramático buscar la confirmación en pequeñas comunidades rurales donde se levantan aulas de clase preñadas de sobre costo, centros de atención sanitaria más vacíos que la cuenta corriente de un mendigo y electricidad que en lugar de traer desarrollo viene con la televisión a cuestas.

Un médico ngäbe calificaba hace unos meses esta trilogía como “la mentira del desarrollo”. Lo hacía desde una comunidad con necesidades básicas insatisfechas y partía de una reflexión más que acertada: “Vaya a las comunidades que tienen escuela, centro de salud y energía desde hace 20 años y mire si han salido de la pobreza…”. No, no habían salido porque era pura forma sin fondo, ladrillos sin masa gris, aparente atención estatal y verdadera desidia de Estado.

Esto no es solo culpa de los gobiernos, hacedores irreflexivos que corren contrarreloj para apuntarse éxitos mediáticos, sino de unas sociedades que se emboban con la cáscara brillante de la fruta y se olvidan que el licuado que alimenta se hace con la pulpa.

Leo un análisis sobre el mal estado de las escuelas, otro sobre el mal estado de los parques, es fácil oír lamentos sobre el triste aspecto de los hospitales, pero no es tan habitual escuchar debates de fondo sobre la calidad o el tipo de educación que acontece dentro de las escuelas, o sobre medicina preventiva o atención humana a los pacientes… Eso no solo depende de presupuestos, sino de cabeza y sensibilidad.

Es decir, el problema no está en si se fusiona o no el Inac con el Ipat sino en el trasfondo filosófico de la decisión (si es que la tiene); lo más grave no es que en las escuelas haya goteras, sino que los docentes vayan desganados a repetir lecciones mal aprendidas repletas de imaginarios y prejuicios nocivos para la salud; lo más triste no es que falten medicinas, sino que desde unos cuantos pasos antes a los pacientes que buscan el sistema público se les trate a las patadas como si fueran ganado; la pregunta no es cuántos baches tiene la carretera a Darién (unos dos millones) sino para qué sirve, qué concepto de desarrollo territorial ha pensado el país para una zona como esa; la disyuntiva no era ampliar o no el Canal en función de presupuestos y complejidades ingenieriles, sino qué país se quiere tener en 25 años y si es el de empleados de servicios o el de autogestión y sostenibilidad; el reto no es solo bajar el costo de la canasta básica, sino plantearse por qué el país no produce ni da acceso democrático a alimentos de calidad y en la cantidad suficiente para poder presumir de soberanía alimentaria…

La lista de pulpa venida a menos es interminable y el peligro de las cáscaras es que puestas en un mal lugar pueden provocar una resbalada monumental. Hay que provocar los grandes debates para encontrar las pequeñas soluciones. Por desgracia estamos en la era de la ‘productividad’ y las ‘cifras’ y los gobiernos tienen pánico a pensar porque eso se podría traducir en inactividad. Las personas también estamos atenazadas por ese temor. Se ensalza al que hace, se aparta al que piensa. Por eso el nuevo presidente gusta tanto, por la imagen de “hacedor”.

Sin embargo, algunas cabezas pensantes son necesarias en cualquier fórmula de éxito. Dudo que desde los gobiernos o desde los platós de televisión se colabore a redefinir el modelo de país más allá de los bloques de cemento, por eso es imprescindible que periódicos, grupos civiles organizados, vecinos, obreros, estudiantes y demás sectores del país se den a la tarea de pensar para proponer. Parece un trabajo estéril, pero es siembra para futuro, fruta fresca entre tanto fruto seco.

4/8/09

Urgencia y conmoción

EL MALCONTENTO
Urgencia y conmoción


Paco Gómez Nadal
paco@prensa.com

Sí, fue de esos textos que a uno lo reconcilian con la pluma. Un desahogo de Daniel Domínguez, el pasado viernes, en el que se pudo vengar periodísticamente de todos los “bodrios cinematográficos” que provocan úlceras a gente como él, con buen gusto estético y bagaje cultural. Pero el mundo es al revés.

Leyendo el texto de Daniel, veía que las cintas que peor salían paradas suelen ser las más taquilleras, las que provocan filas interminables de jovial espíritu familiar. Y lo más sorprendente es que la mayoría del público puede ver la tercera o la decimoquinta saga de una de esas películas de terror que dan risa mientras come nachos con salsa de carne y sorbe ruidosamente un refresco de medio litro, comenta cada instante de acción con la compañía y atiende el teléfono celular al tiempo. ¡Qué envidia!

Tampoco parece que los libros de autoayuda sean indigestos, como afirmaba mi héroe semanal, porque el único local que permanece semivacío en los centros comerciales es el de la librería y cuando entra algún despistado suele caer en los brazos de Pablo Cohelo o compra con devoción “Cómo ser feliz en tres pasos mágicos” o “Sea un gerente del cambio”. La vida apostada a fórmulas tan inútiles como el horóscopo o una máquina tragamonedas (los libros de autoayuda no dejan de ser eso: una máquina que traga momeadas a favor del que se ayuda a si mismo escribiendo obviedades tan inútiles como ingenuas).

No es un mal panameño, sino bastante generalizado. La globalización económica y cultural (entendida por cultura la industria del entretenimiento) ha empequeñecido la masa gris hasta convertirla en grano de maíz resecado. Un universo este en el que los “intelectuales” son sospechosos; los artistas, “perezosos y bohemios”; los filósofos, “especie en extinción”, y los provocadores se abren paso en la lista de “terroristas” peligrosos para la sociedad. Ese es el tiempo que nos ha tocado, pero en el caso de Panamá la cosa tiene particularidades. El mercantilismo tiene tanto espacio en la ciudad que se vende al país como un destino de shopping, cualquier taxista sabe dar recomendaciones sobre dónde comprar mejor y más barato, pero dudo que pueda comentar sobre los valores culturales del país.

Toca entonces una alianza poderosa entre los sectores que sí le apuestan a la creación y a la divulgación de ésta. No parece que el nuevo gobierno se libre de la ceguera cultural de los anteriores. Confunde cultura con turismo y no tiene ni una propuesta programática sobre el asunto. Así que, seamos realistas: es el momento de la sociedad civil –una vez más-.

Se acerca la Feria del Libro, que aunque suele vender más biblias y coelhitos que otra cosa, es un espacio estimulante y necesario –más en su programación que en los stands-. Corresponde atiborrarla y pedir más, pedir mucho más. Hay que impulsar una gestión cultural independiente y retadora que provoque los debates sobre el país que ya desde la política parecen agotados; una lectura del territorio y de las gentes mucho más inteligente y provocadora que los cientos de informes con tufo ONU que llenan los anaqueles del olvido y la desidia; una divulgación masiva de clásicos y contemporáneos para que la identidad se construya sobre bases diferentes al cemento.

Para ello, los creadores y el sector cultural deberán sacudirse cierto autismo, cierto elitismo que lo acompaña por naturaleza. Entender que en cultura también nos queda un camino democratizador tan necesario como sugerente. Escribía hace poco en otro contexto, que “hay urgencias que requieren de toda la paciencia del mundo”. Esta es una de ellas.

Para liberarnos de los bodrios cinematográficos y escritos, para que vuelvan a florecer las secciones culturales en nuestros diarios de escándalos, para que las efímeras Margaritas sean sustituidas por los artistas de recorrido, para que el espíritu vuele en lugar de arrastrarse entre saldos y créditos… hay que trabajar sin prisa pero sin pausa, apostándole a un universo en el que un verso o una imagen conmueva hasta el punto de movilizar. “Sucede en general que el mundo cambia. / no demasiado rápido a menudo, / que un día / es extraño sentirse detenido / con demasiadas cosas escritas en la piel / y uno se encuentra en medio de todo cuanto era, / desconcertado y torpe, /sacrificando incluso la nostalgia”. (Luis García Montero)

1/8/09

Publicado el martes 28

EL MALCONTENTO
¿A quién le toca ahora?


Paco Gómez Nadal


Somos débiles. Como ciudadanos y ciudadanas somos muy débiles. Dependiendo del momento pasamos de ser simples contribuyentes, a damnificados o reclamantes sin futuro en medio de un corte de carreteras. Y, en los momentos más lamentables, pasamos a ser “El Pueblo”. Los extremos se tocan. Somos pueblo cuando algunos iluminados populistas de izquierda deciden provocar una revolución en nuestro nombre partiendo de la teoría foquista y aseguran, con seguridad abrumadora, que nos falta conciencia de clase –cosa cierta, pero que no justifica que tomen decisiones por nosotros-. También somos pueblo cuando, en el otro extremo, unos tremendamente ejecutivos populistas de derechas deciden que ha llegado nuestra hora. La palabrita es útil en todo momento, siempre y cuando sea solo un eslogan publicitario.

Durante los procesos electorales escuchamos incesantemente arengas que prometen un accionar para responder al pueblo, pero cuando se llega al gobierno se suelen anunciar medidas “poco populares” para favorecer a ese mismo pueblo. Un enredo. Inauguramos en Panamá un gobierno populista, una necesidad histórica de todo país si se logra analizar bien. No porque vaya a lograr cambios sustanciales en el derrotero de cemento y vidrio de Panamá, sino porque sin quererlo de tanto repetir el mensaje de que “Ahora le toca al pueblo”, el pueblo se lo puede creer y empezar a exigir sus derechos.

Si el populismo de Martinelli logra devolver a los ciudadanos a la política, será ganancia. Pero en el camino vamos a tener varios cadáveres. Uno es el de la institucionalidad. El modelo de “presidente-sheriff” que va por el país tumbando paredes, poniendo vallas publicitarias sin firma, y ordenando acciones espectaculares va en contra de toda institucionalidad democrática –que debería funcionar sin necesidad de tener un superhéroe mediático al frente-. Otro cadáver es el de lo público: nadie quiere que el presidente viaje utilizando su tarjeta de crédito platinum, sino que utilice bien los recursos públicos. Uno tercero es el de la justicia: no necesitamos este goteo incesante de filtraciones o denuncias mediáticas sobre los actos de corrupción del gobierno saliente; lo que precisamos es que los responsables de tales actos vayan al banquillo de acusados y paguen por sus fechorías. Y el cuarto cadáver –que no es exclusivo de gobiernos populistas- es el de la verdad: que queda enterrada bajo una inmensa cantidad de lemas facilotes y frases de cajón que caminan entre el nacionalismo rampante y los tópicos políticos más gastados. De hecho, una de las cosas más interesantes de la puesta en escena populista es que cuando hablan apelan a la “cruda verdad” y logran una empatía brutal con los ciudadanos a punta de mentiras.

Y mientras… seguimos sin modelo de desarrollo para el país. Ni lo tenía Torrijos, que obvió todos los esfuerzos de planeación de la Concertación Nacional o de los pactos de Estado anteriores, ni lo tiene Martinelli –rodeado de estupendos asesores de imagen y con un coctel de medidas llamativas que sorprenden, pero no construyen-. Por eso, ‘Ahora le toca al Pueblo’, es verdad. Porque si la sociedad civil no se organiza, no discute, no reflexiona antes de creer este aluvión de promesas parecido al maná celestial… puede verse sorprendida, una vez más, cuando haga balance dentro de cinco años.

Si es la hora del pueblo, entonces hay que escucharlo, hay que respetarlo, dejar de tratarlo como un ejército de pobres que hace filas kilométricas paraacceder a las migajas de este festín de millonarios. Si es la hora del pueblo, digamos de qué pueblo, quién entra en esa categoría, o si entramos todos. Si ahora le toca al pueblo, el Gobierno va a necesitar de asesores “populares”, porque la mayoría de sus altos cargos no lo han visto de cerca en su vida –excepto cuando el pueblo ha sido empleado de sus empresas-. Me había prometido no escribir sobre este gobierno hasta que se cumplieran los 100 promisorios días. Ven que mi fuerza de voluntad es limitada frente a la fuerza de los hechos –y de las vallas sin dueño-.