Ya debes saber que no cierro años sin anhelos incumplidos.
Este no iba a ser menos. Pero también deberías estar segura de que mis sueños, agazapados
en tu piel, se cumplen puntual y periódicamente siempre que posas tu alma junto al café de la mañana y untas con tu voz la árida espalda de mi mañana.
26/12/14
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