4/5/11

Malos

Hace tiempo que no creo en buenos y malos. Especialmente, porque eso del bueno y el malo es relativo y porque el discurso de os supuestos buenos cada día está más lejos de sus prácticas.

Mi subconsciente, cuando trata de discriminar a unos de otros, tiene graves problemas por culpa de la influencia cultural. Por ejemplo: si pienso en las películas gringas de indios y vaqueros, los malos eran una gente bastante pacífica que solía ir semidesnuda y que trataba de proteger su territorio contra unos beatos en carreta a los que siempre ayudaban unos señores vestidos de azul impoluto y que, a toque de corneta, mataban a todo siux que se encontraran en el camino. Nunca vi en esas películas una detención ni un juicio a uno de esos indios malísimos y que intimidaban con pintura roja barata. Los buenos siempre mataban en las películas de los gringos, ejecutaban a sangre fría o mataban en caliente defendiéndose de una trampa o una emboscada (los malos siempre atacan a traición).
Otra versión de la historia la recibí en la escuela y en la universidad. Y me la creí durante mucho tiempo. Consistía, entre otras cosas, en considerar que el Estado de Derecho y la Declaración de los Derechos Humanos eran una trinchera amable para considerarse bueno. Pero resulta que el Estado de Derecho se ha ido tan hacia la Derecha que justifica lo injustificable y le ha tomado gusto a eso de vencer por goleada (o, mejor, por asesinada).
Era evidente que la operación contra Bin Laden NO FUE LIMPIA. Nadie se escandalizaba de que tropas de un país entraran en otro país sin permiso y ejecutaran a un tipo malísimo que estaba desarmado y rodeado de fieras tropas de defensa (parece que el comando gringo consiguió neutralizar a 12 de esos defensores y que 9 eran niños de entre 2 y 12 años y 3 eran mujeres).
La hija de Bin Laden que sobrevivió al ataque dice que a su papá lo ejecutaron, pero no al creeremos porque tiene el gen de satán en el cuerpo. El director de la CIA asegura que se llegó a la mansión de marras gracias a las torturas por las que hemos apaleado en público al procer George W. Bush (al que habrá que homenajear en el Ground Cero).
O se me han metido parásitos en el estómago o estas ganas de vomitar tan hijoeputas me las provocan esta mano de malos-buenos, de macarras con chaqueta y corbata, de hipócritas Obamas o de arrastrados Zapateros, esta mano de canallas que me hacen sentir que estoy del lado de los malos y que consiento en silencio su estratégia de atizar el fuego para que cada día tengamos más violencia, más odio, más sangre sobre nuestras conciencias. (cá-bró-nés)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Cada vez veo más coherencia en el lado de los "malos"

Bs

Maria José

veronica dijo...

esta nota me permií compartirla en mi facebook. este concepto de la maldad y que los buenos tengan derecho primero a adueñrse de la verdad y segundo 2licencia alo james bond" para hacer lo que les de la gana. Espero tengas un lindo verano junto a los tuyos